Los buquinistas a orillas del Sena
La vida en las riberas del Sena forma parte de su patrimonio. Ente los elementos inseparables de la vida del río, se encuentran los buquinistas o libreros de viejo. Los buquinistas, muy populares entre los visitantes de la ciudad, forman parte de una auténtica comunidad de expertos libreros.
Vendedores ambulantes convertidos en libreros
Durante el siglo XVI, los vendedores de libros que no estaban sometidos a la censura real eran vendedores ambulantes. En cierto modo libreros callejeros, los buquinistas también recibían el nombre de libreros feriantes. En 1859, apareció una serie de cajas verdes tipificadas en puntos fijos en los pretiles de la ribera del Sena. Así nacieron estos libreros de viejo tal y como los conocemos hoy en día.
Actualmente hay 1.000 cajas verdes para cerca de 200 buquinistas establecidos en París.
Libros antiguos y grabados
Hoy en día el comercio de los buquinistas está dedicado a los libros antiguos, la prensa antigua y los grabados. Podemos encontrar entonces numerosas estampas de París, como tarjetas o carteles del siglo XIX. Se trata de un tipo de librería sumamente especializada. Si buscáis un pequeño tesoro, seguramente lo encontréis en el puesto de un buquinista.
La actividad de los libreros se diversifica
Es posible encontrar recuerdos en las cajas verdes de los libreros de viejo. Esta es una práctica muy criticada por las autoridades, ya que podría perderse la esencia del patrimonio del Sena. Y es que desde que las orillas del Sena fueron declaradas Patrimonio Mundial de la Unesco, la normativa que regula la actividad de los buquinistas es mucho más estricta.
¿Dónde y cuándo encontrar a los buquinistas?
La mayoría de las cajas verdes abren a partir de las 11.30 y permanecen abiertas hasta la caída del sol.
Ya seáis curiosos, apasionados de los libros o simplemente paséis por la zona, no dudéis en visitar a uno de estos buquinistas. Los encontraréis sentados en un taburete junto a sus cajas verdes con un gran sombrero para protegerse del sol. Buscad con atención en cada puesto. Sin duda habrá algún tesoro único que será el mejor recuerdo de París que os podáis llevar.
