Île de la Cité

El distrito de Île de la Cité en París, que disfruta de una posición privilegiada, es uno de los puntos turísticos e históricos más destacados de la Ciudad de la Luz. La zona ha sido habitada desde la antigüedad: el Sena, que rodea este territorio insular, protegía a los parisinos de las invasiones.

Visitar Île de la Cité le permite girar lentamente una de las páginas más gloriosas de la historia de Francia. La catedral de Notre Dame, joya de la arquitectura gótica, es uno de los monumentos turísticos más visitados del mundo. Turistas y parisinos admiran su fachada, sus torres, sus estatuas y gárgolas desde el atrio delantero, donde se sitúa el Punto Cero de las carreteras de Francia: este lugar es tan extraordinario que determina el kilómetro cero de todas las carreteras que salen de la capital. Los amantes del turismo histórico seguro visitarán la cripta arqueológica de Notre Dame, que alberga bajo tierra los restos de las primeras ocupaciones en la Edad Antigua.

Una visita guiada a Île de la Cité en París no puede dejar de incluir la Conciergerie. Aunque el edificio se impuso desde el siglo X hasta el XIV como prestigiosa residencia de los reyes de Francia, luego sirvió como prisión y palacio de justicia para convertirse, a finales del siglo XVIII, en tribunal revolucionario. La sala de guardias de Felipe el Bello y las cocinas de Juan el Bueno aún atestiguan la majestuosidad de los lugares. Las celdas también están cargadas de historia: en una de estas celdas estuvo encarcelada María Antonieta. Otro tesoro inestimable, de visita obligada en Île de la Cité: la Sainte-Chapelle. Este tesoro de la arquitectura medieval fue construido por San Luis para albergar algunas de las reliquias más sagradas y preciadas de la cristiandad.

Pero también podrá apreciar el alma de este distrito, que ha logrado cultivar varios oasis de vegetación. La plaza Dauphine, la plaza de Vert-Galant y la plaza Juan XXIII ofrecen un espacio de tranquilidad y naturaleza a los visitantes. También podrá pasear por las riberas, en el muelle de los Orfebres, que alberga la Prefectura de la Policía, el muelle del Reloj o el muelle del Mercado Nuevo y ver pasar las barcazas que ofrecen cruceros por el Sena a los turistas.

Île de la Cité, conectada por la estación de metro Cité (línea 4), forma parte tanto del I distrito como del IV. También permite acceder fácilmente a algunos de los monumentos y lugares más bellos de París. Cruzando el Puente Nuevo, que en realidad es el puente más antiguo de la ciudad, puede llegar fácilmente al Museo del Louvre. También puede recorrer a pie las calles y tiendas de un famoso barrio, Le Marais, situado al norte: no se pierda la torre de Saint-Jacques, vestigio de una iglesia ya desaparecida, ni el centro Georges Pompidou. Los puentes situados al sur, como el puente Saint-Michel, le llevarán al Barrio Latino, también famoso por su animado ambiente: el Museo Nacional de la Edad Media se ha renovado en 2018, tal vez sea la ocasión de descubrirlo.

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